El presidente de la República describió al abigeato como una “industria organizada” a la que se agrega el “flagelo de las jaurías”. “No se puede ser libres e independientes en cualquier punto del país si no se tiene una autoridad que proteja el ejercicio de nuestra vida familiar y laboral”, agregó.
El mandatario fue enfático al afirmar que desde el Gobierno se respaldará el accionar policial y se protegerá a los ciudadanos que cumplan con la Ley. Añadió que se trabajará en la protección de los pequeños, medianos y grandes productores y afirmó que el que más sufre el delito de abigeato es el pequeño productor.
En ese sentido, subrayó la voluntad de las autoridades del Ministerio del Interior para descentralizar la Dirección Nacional de Seguridad Rural, abrir más dependencias policiales en el país y mejorar la infraestructura y citó, como ejemplo, la incorporación de nuevos móviles.
Lacalle Pou hizo referencia a la importancia de la cadena de mando y expresó que de lo que se trata es de que las jerarquías policiales “tengan más obligaciones que sus subalternos, porque se manda y se predica con el ejemplo”. “Tenemos la ley, la infraestructura, el equipamiento y tienen, la Policía Nacional y la Dirección Nacional de Seguridad Rural, el respaldo, además de la exigencia del Gobierno para cumplir con lo que los ciudadanos de bien necesitan”, resumió.
La nueva repartición responde a un compromiso del Gobierno, fue creada por la ley n.º 19.889, más conocida como de Urgente Consideración, y está ubicada en el kilómetro 94,2 de la ruta n.º 5.
Por su parte, Larrañaga describió que es la primera dirección nacional del ministerio cuya sede se instaló en el interior del país. Se trata de una unidad policial que en sus inicios estará integrada por 267 funcionarios y cuyos cometidos serán el diseño, la coordinación, la ejecución y la evaluación de las políticas de seguridad en el medio rural.